‘Game of Thrones’ terminó su cuarta temporada por todo lo alto, con momentos espectaculares y memorables. Ahora toca esperar hasta fines de marzo del próximo año. Por ahora hacemos un repaso de los mejores momentos de esta temporada.
SPOILERS: Si no has visto la cuarta temporada de esta serie, no leas esta entrada.1. Arya y El Perro
Esta temporada marcó la evolución de Arya Stark, de una niña compasiva e indefensa a una implacable vengadora. Arya ya aprendió a caminar sola. Tras dejar agonizando al Perro, otea el horizonte desde la proa de un bajel en pos de Braavos.
2. La boda púrpura
Una muerte nunca había causado tanta alegría en el mundo de Game of Thrones. En la segunda boda más importante de la saga, el sádico Joffrey Baratheon finalmente muere envenenado; su rostro convulsionado y agonizante formará parte de nuestras pesadillas por siempre.
3. La rompedora de cadenas encierra a sus dragones
Daenerys y sus conflictos sobre como gobernar los pueblos liberados, son de los puntos bajos de la serie, que cierra la temporada cuando recibe noticias de que su “hijo” Drogon está matando niños. El resultado: las cadenas que quiso quitar a todos los esclavos, acaba poniéndoselas a sus propios hijos. Los “chillidos” de los Viserion y Rhaegal siendo encerrados nos rompen el corazón tanto como a Dany.
4. Los caminantes blancos y el Rey de la Noche
Un momento de verdadero asombro porque fue una especie de spoiler para los lectores de los libros. Lo que ocurre es que la escena en la que vemos al bebé transformarse en un white walker nunca antes había ocurrido en los libros. Con esto, nos explican un poco de dónde vienen los personajes que nos causan pesadillas desde el inicio de la serie.
5. El juicio de Tyrion
Peter Dinklage se vió envuelto en un halo ganador de un próximo Emmy con su impresionante actuación en el juicio de Tyrion. Su discurso final, cuando se vio traicionado y abandonado por todos, ha sido uno de los momentos cumbre de la temporada demostrando que se puede herir con palabras, tanto con espadas.